Ya estamos casi a finales de mes, sonando el pistoletazo de salida , para ir publicando recetas navideñas, aunque este año cualquier celebración es atípica , demasiadas ausencias debido a las terribles circunstancias del maldito virus.
Pensemos en la salud, en que estar sanos, aunque no nos podamos reunir con la familia fisícamente, ya es un gran aliciente para guardar en los bolsillos la esperanza.
Permitamos su compañía en este camino y esperemos que pronto esté despejado de piedras.
Esta receta, hoy en día, archiconocida, ya la tenía publicada
en mi antiguo blog, La cocina de Samira, hace siete años, como un pequeño homenaje a mi querido
sobrino, fallecido en 2012.
Quien me seguís hace tiempo, sabéis que no fue una etapa
fácil de superar, pero la vida sigue.
La transcribo igual que la escribí en su día porque quiero
que esté también en esta nueva libreta virtual, pues él ,era loco por el turrón
de chocolate y siempre que lo preparo, su recuerdo aún se hace más vivo si
cabe.
-Dónde están los chiquillos, se han ido?
-Javier y M , dónde estáis ?
Se oyen ruidos de fondo , cris, cras, cris, cras… Silenciosa, me
aproximo a la despensa, entreabro la puerta y ahí estáis los dos, tú y tu
primo, mano a mano devorando a hurtadillas el turrón.
Debería reñiros pero en el momento me da un ataque de risa .
Año tras año, a pesar de haber crecido, los dos seguíais con este mismo
ritual porque tu lema era : “Una Navidad sin turrón de chocolate, no es Navidad”.
La nostalgia me acecha, se torna dolorosa e inquieta mientras
estoy en la cocina preparando esta golosina.
Al mismo tiempo, esa añoranza de ti (eras tan joven) y de los buenos momentos
vividos en estas fechas señaladas me reconforta, porque vuelvo a oír tu voz, a
revivir el reencuentro , los abrazos, las risas, las mil fotos que nos
hacíamos, los juegos de mesa , los trucos de magia, la comida en la mejor compañía.
Ya nunca será igual mi sobrino querido. El vacío de tu
ausencia lo llenamos con tu grato recuerdo y un montón de anécdotas maravillosas porque ese amor que sentimos por ti ,irá siempre tatuado en
nuestro corazón.
Te queremos Javier .
Ingredientes :
50 g de manteca de cacao
100 g de chocolate negro de cobertura (utilizo Barry)
175 g de chocolate con leche de cobertura
65 g de arroz inflado chocolateado
Elaboración :
Ponemos en un bol la manteca con los chocolates y llevamos
al micro a 800W, a intervalos de 20 segundos para que se deshaga con sumo
cuidado, ya que no nos podemos descuidar porque enseguida se quema.
Cada intervalo, retiramos, removemos con varillas o espátula.
Con el calor residual termina por deshacerse.
También podemos hacer este proceso al baño maria.
Una vez la crema esté bien homogénea, agregamos el arroz
inflado y mezclamos perfectamente.
Pasamos la mezcla al molde de silicona especial para
turrones. Si no lo tenemos, se forra con papel de hornear un túper de plástico
o un molde tipo cake.
Esperamos que se solidifique y ya está listo para degustar.
¡Madre mía, Bego! Hoy me has cogido con la guardia baja, y no he podido evitar empatizar contigo, dejándome con el corazón en un puño. Qué dolor se siente cuando nos falta un ser querido, así pasen cien años, seguirá siendo igual de triste, y aunque creamos ser residentes por naturaleza, es inevitable que se nos salten las lágrimas con estos recuerdos en los que de alguna manera, muchos nos vemos reflejados.
ResponderEliminarPero queda lo bueno, seguro que tu sobrino os dejó miles de recuerdos tan bonitos como este, y que ahora después de tanto tiempo, rememoras con una sonrisa en los labios.
No sé qué tendrá el turrón de chocolate, pero en mi familia pasa igual, mis niñas y mis niños dicen lo mismo, podemos poner todo lo que queramos, pero por favor, que no falte el turrón de chocolate, que por cierto nunca he hecho personalmente, siempre compramos el de la famosa marca, porque no quieren otro.
Besitos
Es un bonito homenaje a los seres queridos, tu sobrino y los que ya no estén, pero seguro que se suman a los recuerdos en fechas tan compartidas como la Navidad.
ResponderEliminarSi el turrón comprado ya está rico, el casero, preparado con cariño para los que más queremos, es el doble de bueno. Que ganas de darle un bocado por favor!
Bss
Woww pues tendré q probar
ResponderEliminarHola Bego. Supe como te sentiste en aquel momento ya que te llevo siguiendo y visitando desde hace ya tiempo. Y ya veo que los recuerdos se mantienen intactos, eso nos hace que, a pesar de la tristeza, la vida siga su curso. Tu sobrino seguro que te lo agradecerá aunque no te lo pueda expresar pero lo disfrutará como siempre.
ResponderEliminarMe guardo tu receta. Nunca he hecho turrón y dado que el chocolate nos gusta mucho voy a ver si este año, en estas Navidades, que van a ser un tanto raras puedo poner mi granito de arena, en este caso de chocolate jj.
Un abrazo.
Que estupemdo turrón :-)
ResponderEliminarMe acuerdo perfectamente cuando contaste por aquí lo de tu sobrino, no soy de muchas amigas virtuales porque quiero saber y no solo tener. Bego cuando el corazón se rompe por una pérdida traumática, no se cuanto tiempo tarda en recuperarse, sinceramente creo que nunca se recupere, nos queda el cerebro que ese con el tiempo, si, se reorganiza bien...
1 saludito
já comi varias vezes de compra, nunca me deu para fazer.
ResponderEliminarEsse ficou perfeito.
¡¡Hola Bego!! Vaya, cuanto siento vuestra pérdida, todos sabemos que estamos de paso y que algunas muertes, son ley de vida, pero cuando la pérdida es de un ser que tiene aún tanto que vivir, es aún más dolorosa si cabe. Nunca lo olvidaréis, eso está claro, pero recordar los buenos momentos con él, recordar su alegría, como era, lo que hacía y hacerlo con una sonrisa, es lo único que nos queda de ellos y ya significa que no los recordamos con dolor.
ResponderEliminarA mí también me encanta el turrón de chocolate, de hecho, es el único que como en navidad, y además, casero, ya es sublime del todo. Un precioso regalo para tu sobrino, no sólo por el turrón, también por su recuerdo. Besitos.
Hola Bego!. No he podido dejar de emocionarme con tu recuerdo, qué bonito y triste a la vez, siempre de alguna manera estará con vosotros. En estas fechas (aunque siempre nos acordemos de ellos) estan como mas presentes. Dices bien seran unas Navidades extrañas, y sí, yo también me quedo con lo de que si no podemos vernos porque no se puede viajar, ni muchas reuniones lo importante es que estemos todos bien.
ResponderEliminarEl turrón una exquisitez, a mi hija le encanta este también, es su preferido, voy a ver si hago y se lo mandaré, si puedo.
Un fuerte abrazo.
Son recuerdos bonitos y tristes a la vez, pero tu sobrino vive en vuestros corazones y aunque sé que nunca acaba de superarse del todo hemos de quedarnos con esos momentos. Mucho ánimo y más en estas fechas que aún se notan más las ausencias.
ResponderEliminarNo es de extrañar que ese turrón de chocolate volara, es el preferido de la mayoría de gente joven y la verdad es que se ve muy rico.
Besos.
Que turron mas rico , esto es lo que nos queda los bonitos recuerdos besitos
ResponderEliminarAllá donde esté, seguro que hoy ha sacado su sonrisa a relucir al ver como le vuelves a dedicar este delicioso turrón!
ResponderEliminarUn abrazo fuerte!
Me acuerdo de este turrón y de esa época 😔el recuerdo es lo que nos queda y hace que estén siempre vivos en nosotros bonito homenaje ❤y delicioso el turrón 😋 un abrazo de esos que te hacen sentir el cariño
ResponderEliminarHola Bego. Has hecho muy bien en recuperar esta receta de turrón de chocolate que reaviva tus recuerdos y la tristeza tan grande que los acompaña. Puedo entenderte y ponerme en tu lugar, tampoco puedo, por mucho que pasen los años, superar la ausencia de mi padre.
ResponderEliminarLo único bueno en estas circunstancias es que recordamos todos los momentos buenos junto a ellos con mucha más intensidad e incluso con una sonrisa.
Te envío un fuerte abrazo y muchos besos.
El turrón de chocolate no puede faltar en esta Navidad tan diferente y dura que nos tocará vivir, en mi caso, mucho.
Me apunto a un trocito virtual.
Cuidaos mucho.
Si me acuerdo que habias contado lo que le paso a tu sobrino....pero recuerda que la muerte es solo un paso a una mejor vida....y cada vez que re-cuerdas (re= repetir y cuerdas viene de cordis-corazon)....cada vez que lo recuerdas lo pasas de nuevo por tu corazon...alegria y re-cuerda cuando pruebes un trozo de ese maravilloso turron!........Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarAinns amiga por un momento he sentido esa pena que debes llevar por dentro, pero es verdad que la vida sigue y aunque no estén los nuestros la vida tira para alante sin parar un minuto.
ResponderEliminarHas echo bien en volver a publicar la receta del otro blog aqui, es un homenaje a tu sobrino muy bonito para tenerlo en mente y tambien es verdad que la navidad sin chocolate no se concibe.
Me imagino tu cara al ver a los dos con el turrón, jaja, creo que hubiera reaccionado al igual que tu.
Un beso preciosa
Hola Bego, muchos animos, es una bonita entrada y siempre será un bonito sentir. Hay que seguir y que manera más bonita de cocinar cositas tan deliciosas, me encanta el chocolate!
ResponderEliminarBesos.
Hola Bego, qué preciosa entrada, las navidades este año no serán igual pero intentaremos que seguir adelante or todos los ue estan a nuestro lado. Con este turrón endulzamos el momento y se anima el corazón. Un beso!!
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