Dicen que no es más rico quien más tiene, sino quien menos necesita y así es.
La felicidad de las pequeñas cosas, de los detalles mínimos
que reconfortan y nos hacen sentir afortunados no se pagan con nada, como me sucede a mi cada vez que preparo este pan con el que agasajarme
y a la vez mimar a mi gente.
Soy así de simple, poco me hace falta para crearme esa pizca de chispa que de luz a estos días tan grises que nos acompañan con tan tristes noticias, pero no podemos perder el pellizco de la esperanza o estaremos vencidos de antemano.
Vamos con la receta , que os animo a probar porque es un pan
lleno de matices , con una corteza potente, una miga suave y lleno de aroma . No sabéis lo bien que olía mi cocina mientras se estaba horneando.
Ideal para acompañarlo con quesos y mermelada .
Ingredientes :
325 g de harina de fuerza
75 g de harina de centeno integral
1 cdita (de las de café) de sal
1 cdita de canela molida
150 g de masa madre
175 ml de agua templada tirando a fría
50 ml de aceite de oliva virgen
5 g de levadura fresca de panadería
25 g de miel
125 g de pasas (se le pueden poner más , al gusto de cada
cual)
Elaboración :
Mezclamos harinas , sal y canela en un bol.
En otro, batimos la masa madre con el agua, aceite y
levadura desmenuzada , junto con la miel.
Una vez bien mezclado, lo pasamos al bol de las harinas y
mezclamos todo perfectamente.
Tapamos con un paño ligeramente humedecido y dejamos reposar
la masa diez minutos.
Pasado el tiempo, aceitamos ligeramente la superficie de
trabajo , amasamos diez segundos y dejamos reposar de nuevo otros diez minutos.
Después amasamos de nuevo, introduciendo las pasas en la
masa . Le damos forma de bola , depositamos en el bol y volvemos a taparla,
dejando que repose en un sitio templado , fuera de corrientes durante una hora
. El microondas o el horno apagado es un buen sitio .
Pasada la hora , espolvoreamos la superficie con harina y volvemos a amasar con delicadeza durante un rato . Le damos forma de bola y a continuación la aplanamos un poco , dándole vueltas como si fueran los pétalos de una flor , ejerciendo tensión , hasta recoger en el centro y rodamos para tensionar suavemente.
En esta ocasión le he dado forma alargada pero se puede
dejar redondo, tipo panchón.
(La foto del pan entero no la pude hacer porque me descuidé
y mis ratoncitos, lo empezaron antes de lo esperado sin avisarme, pero no los
culpo porque el olor que desprende es sumamente tentador).
Espolvoreamos el banetton de harina y pasamos la masa a él
dejando la parte fea de los pliegues hacia arriba . Si no se dispone de
banetton lo ponemos sobre papel vegetal y colocamos por ejemplo unos brick a
los lados para que la masa no pierda forma al levar.
Dejamos fermentar de nuevo hasta que doble volumen y una vez
conseguido la volcamos sobre un papel de hornear espolvoreado de harina y
sémola . El papel lo pondremos sobre una bandeja lisa que después nos ayude a traspasarlo al horno, con un movimiento rápido y preciso.
Pondremos el horno a calentar a 210º con un recipiente con
agua en la base para que cree vapor.
Dejaremos dentro mientras calienta, la bandeja del horno para
que ésta , esté muy caliente a la hora de traspasar el pan.
Con una cuchilla bien afilada, hacemos unos cortes ,
vaporizamos el pan con agua y llevamos a hornear durante 50 minutos . Al darle
con los nudillos, la corteza ha de sonarnos a hueca.
Retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla . Ya
frio lo envolvemos en un paño de lino o algodón que lo conservará
perfectamente.
Como me gustaría probarlo, parece hasta bizcocho y si el aroma que desprendía en la cocina era divino, me imagino su sabor más rico todavía. Y si, hay que valor y disfrutar estas pequeñas cosas con las personas que queremos, lo demás que se quede fuera si es malo.
ResponderEliminarUn beso.
BEgo yo leo canela y los ojos se me ponen como platos. Súper bonito el pan que nos traes, y la combinación de sabores muy tentadora ¡Besos mil!
ResponderEliminarHola Bego!. Completamente de acuerdo con lo que dices en tu escrito inicial, la máxima que mencionas yo también me acojo a ella, me encanta tropezar con personas como intuyo eres tu.
ResponderEliminarTu pan me ha gustado mucho y ten por seguro que lo haré, yo no lo podre probar pero a mi familia seguro que le va a encantar, tiene una pinta buenisima.
Espero estés bien, al igual que tu familia.
Un abrazo.
¡Hola Bego! Es verdad que no hace falta tener mucho para ser feliz... y este pan... tanto se disfruta el momento de hacerlo, como luego cuando toca compartirlo y disfrutarlo con la familia... esos momentos nos llena de una felicidad, que muchos no entenderán... se ve delicioso Bego... Un beso.
ResponderEliminarPues sí, Bego, tienes razón, en realidad son esos pequeños detalles los que nos dan pequeñas dosis de feliciad para el día a día... Claro que una buena rebanada de este pan a uno lo hace más que feliz, lo tengo más que claro, solo con ver el mimo que pones cada vez que amasas y comprobar el resultado final
ResponderEliminarAbrazos
Tiene que ser un pan muy aromático, además te ha quedado perfecto, tanto la miga como la corteza son inmejorables.
ResponderEliminarHay que alegrarse los días con pequeños caprichitos para que sean menos grises y no perdamos la esperanza y ver una sonrisa en las caras de nuestros seres queridos no tiene precio.
Besos.
¡¡Hola Bego!! Pues, en este momento, te encuentro la mujer más rica, sólo por poseer un pan tan estupendo y rico, con masa madre, casero, ¡con canela que me encanta!, ¡miel! Una delicia, te lo aseguro. No soy envidiosa, pero en este momento, te envidio por haber hecho un pan tan rico, ja, ja. Una auténtica delicia que no tiene precio. Besitos.
ResponderEliminarPero que bien que te quedo :-))
ResponderEliminar1 saludito
Que rico y el olr que echaria en el horno de lujo besitos
ResponderEliminarPero que rico se ve y con esos trocitos de queso se me antoja aun mas!
ResponderEliminarbesos
Hay mi Bego que razón tienes y por desgracia hoy día hay muy poca empatia 🤦♀️aunque también hay personas que merecen la pena ❤me quedo con ese pan que me pierde🤤besinos preciosa
ResponderEliminarBego , que maravilla de pan , mira que me gustan los panes caseros , este tiene que estar para comer y no parar
ResponderEliminarbesinos
Hola, Bego. No puedes imaginar hasta qué punto comparto todo lo que dices. Comparto y he comprobado de primera mano que es así. No te conozco en persona, pero después de tanto tiempo de amigas virtuales en la distancia, hay muchas cosas que se desprenden y nada de lo que nos comentas, me resulta extraño. Lo valoro enormemente.
ResponderEliminarTu pan no sólo lo va a hacer mi paisana Concha, yo desde ayer que lo vi, tengo claro que también, en cuanto pueda, porque el de boniato fue un show.
Soy de canela, no puedo comer pasas, pero ya las sustituiré por otra cosa.
Besos y cuidaos.
Hola linda... que razón tienes, si todo el mundo aprendiera a valorar las pequeñas cosas, otro gallo nos cantaría, pero es lo que tenemos amiga mía y lo tenemos, cerca, lejos, arriba y abajo, no son precisamente buenos tiempos para vivir tranquilo... pero yo soy optimista, así que como en muchos otros momentos negros de la humanidad ¡lo superaremos!
ResponderEliminarY hablando de pequeños placeres, no cabe duda de que tu pan es uno de ellos, está precioso y esa rebanada se ve divina.
Un beso enorme... y que sepas que leerte es un gran placer
Bego tienes razón, estamos imbuidos en un aire de tristeza permanente, que a muchos nos afecta en primera persona, pero hay que ser fuertes, e intentar salir de esta como sea. La cocina aporta muy buenos momentos, sobre todo porque nos mantiene ocupadas para no pensar tanto. Aunque yo no hago pan, intento hacer otras cosas que sé que a los míos les gustan, incluso que, en determinados momentos, les levante el ánimo,
ResponderEliminarTu pan es de esos que solo con el aroma tan delicioso que debe desprender, avanza que el placer está más que asegurado,
Besos.
Hola Bego, te ha quedado precioso y muy rico. Tienes toda la razón es ideal para combinar con quesos y mermeladas, ya imagino su sabor y el aroma de esta delicia de pan. Besos.
ResponderEliminarHola Bego, pues llevas toda la razón y caa día me doy más cuenta de ello. Este pan hace feliz a cualquiera, a mí mucho porque aprecio mucho el buen pan. Un beso!!!
ResponderEliminarHola Bego, qué pan mas bueno nos traes, con ese colorcito que enamora y la miga que dice cómeme!! pues hay que animarse con pequeños detalles y con acciones positivas. Espero que estés bien y los tuyos también, un abrazo!
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