Seguimos en estos días de encierro protector en nuestra casa preparando pan, con el fin de no salir y de paso, mantener la mente ocupada , pero en cuanto esto termine, también volveremos a comprar el pan en la panadería porque más que nunca, nos van a necesitar para remontar esta inclinada cuesta todas nuestras tiendas del barrio.
Es este un pan tierno, con una miga jugosa que se encuentra entre nuestros preferidos.
Es este un pan tierno, con una miga jugosa que se encuentra entre nuestros preferidos.
La avena y la manzana le confieren esa esponjosidad que lo
ayuda a conservarse en perfecto estado durante varios días, según nota de su
autor, el gran Dan Lepard , y digo “según él” porque en mi casa cada vez que lo
preparo , máximo nos dura dos días, así que no lo he podido comprobar.
También le aportan más sabor sin tener que recurrir a grasas
o aceites.
Según estudios los especialistas coinciden unánimemente en decir que el pan nació hace unos 10.000 años a.C , aunque esos primeros panes eran a base de semillas tostadas y agua , cuya masa se calentaba sobre piedras , resultando una especie de torta .
Sin embargo, los verdaderos panes aparecieron sobre el año
3.000 a.C , revolucionando las costumbres alimenticias y la historia de muchos
pueblos y religiones.
Ingredientes :
50 g de avena en copos
100 ml de agua hirviendo
200 g de manzana pelada y rallada
50 ml de agua a 20º
100 g de masa madre
Un pellizco pequeño de levadura seca de panadería o ¾ de una
cdita de la fresca
300 g de harina de fuerza más la que nos haga falta al
amasar en el espolvoreo
¾ de cdita de sal fina
Avena en grano o en copos para el acabado
Para pincelar :
Una yema de huevo
Su mismo peso de agua fria
Una pizquita de sal
Elaboración :
Colocar los copos de avena en un bol y vertemos el agua
hirviendo, dejándolos reposar cinco minutos.
En un bol mezclamos la manzana con el agua, la masa madre y la
levadura.
A continuación añadir los copos de avena pasado el tiempo de reposo.
Agregamos harina y sal , mezclando hasta obtener una masa ligera y pegajosa.
Tapar y dejar reposar diez minutos.
Untar ligeramente con aceite una pequeña parte de la
superficie de trabajo y amasar durante diez segundos, tapar y dejar reposar
diez minutos. Repetir esta operación
tres veces.
Pasado este tiempo, amasamos de nuevo dándole forma de bola
. Nos podemos ayudar espolvoreando un poco de harina.
La pasamos a un bol engrasado ligeramente.
Lo tapamos con un paño o gorro de ducha que tendremos
exclusivamente para este menester y dejamos reposar en un lugar templado fuera
de corrientes, durante una hora aproximadamente.
Una vez transcurrido el tiempo, volvemos a espolvorear la
superficie de trabajo con un poco de harina y pasamos a formar la barra.
Tomamos los dos lados de la parte de arriba y los plegamos
hacia el centro presionando para que queden sellados. Hacemos lo mismo con la
otra parte dejando rodar después la masa hacia adelante y hacia atrás hasta
conseguir la forma deseada.
La trasladamos a una bandeja con papel de hornear y dejamos que fermente hasta que doble casi su
volumen en un lugar cálido y fuera de corrientes.
Ya lista, precalentamos el horno a 210ºC con una bandeja
dentro para que esté muy caliente a la hora de deslizar nuestro pan.
Mientras el horno se calienta preparamos los ingredientes
del pincelado mezclándolos bien y con una brocha barnizamos toda la barra y
decoramos con avena en copos. También le hacemos tres cortes diagonales.
Con sumo cuidado y a la vez con firmeza pasamos el pan sobre
la bandeja del horno.
La horneamos en el centro del horno durante 30 minutos, pulverizando
agua sobre las paredes del horno los cinco primeros minutos.
Pasada la media hora, bajamos la temperatura a 190º y dejamos
otros diez, quince minutos hasta que adquiera un buen color, dependiendo
siempre de cada horno .
Para saber que está en su punto, al golpearlo con los nudillos ha de sonar a
hueco.
Retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Ese pan se come solo, pero acompañado también está muy rico. Los panes caseros son un lujo y en estos dias en que todo el mundo se ha animado a prepararlo por ocupar el tiempo y de paso aprender, van a servir para que se acostumbren a su sabor rústico y después costará más trabajo volver al pan comprado. Pero como bien dices todo el mundo tiene que vivir y tendremos que ayudar a ello, sobre todo en las tiendas de barrio donde la gente se conoce y hay confianza para hablar y para que nos hagan algún favorcito como guardarnos el pan en alguna ocasión o reservas y pedidos. No me quiero desviar del tema que es tu preparación y de buena gana te lo sustraería hoy para darme un homenaje, que también lo merecemos. Un pan divino.
ResponderEliminarUn beso.
Qué maravilla Bego!!
ResponderEliminarEstá que se sale de rico!! Menudo color y menudo corte!!
Ya ha estas alturas es difícil encontrar levadura, aunque está la opción de la casera, que según he oído funciona.
En casa de momento sale mi marido todos los días a la panadería, pero este pan tuyo seguro que no lo tienen :). Maravilloso de verdad!!
Besos
Vaya miga rica se le ve Bego. Seguro que dura más días en perfectas condiciones, pero ha de ser complicado comprobarlo ya que su aroma ayuda a comer un trozo más. El pan casero queda muy rico, pero tienes razón, cuando esto acabe volveremos a comprar pan en las panaderías que se esfuerzan en hacernos llegar buen pan, hay que ayudarles a salir de esta, además que nosotras ya no tendremos tanto tiempo.
ResponderEliminarBego tu pan tiene un aspecto que alimenta, me parece perfecto el que puedas hacerlo tú misma, hacer el pan en casa está muy bien, pero como dices no podemos centrar todo en hacerlo nosotros mismos, que sería y será de todos esos comercios, si no se reactiva la economía, yo no hago pan por que siempre cuento mi escasez de paciencia y tiempo para los leudados, pero ahora más que nunca, porque esos panaderos también han visto mermadas sus ventas, y pensando en el hoy por ti y mañana por mi, sigo comprando lo que puedo, tomando todo tipo de precauciones, por supuesto.
ResponderEliminarBesos
Que rico!!....el pan con la avena remojada le da una humedad deliciosa....lo he probado y es muy cierto!....se ve riquisimo......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarMamaa miq q delicia de pan ❤️❤️
ResponderEliminar¡¡Hola Bego!! ¡¡Qué delicia de pan!! Y original, con manzana y todo. No es un pan para comprobar si dura muchos días tiernos, tiene que estar tan bueno, que no te lo comes en un día por conocimiento, que si no, empiezas y no paras, ja, ja. Besitos.
ResponderEliminarBego yo tambien le estoy dando al pan , este tuyo me ha gustado mucho , ya nos queda menos para salir de esto cuidate guapa besitos
ResponderEliminarNunca juntei fruta num páo , a maça fica boa em bolos ,em pão também deve funcionar bem.
ResponderEliminarGostei do interior.
Querida Bego. Tengo todos los ingredientes y el pan me parece una delicia. No dudes de que en cuanto reduzca mi arsenal de pan del congelador, me pongo con él. Me encanta.
ResponderEliminarAhí seguimos con la lucha. Cuidaos.
Un beso.
Madre mía que ricura Bego y que miga😋😋toda una tentación culinaria amiga😉cuídate mucho, besinos
ResponderEliminarEste lo hago fijo, ahora hago pan cada segundo día, mi panificadora no para,ya hago tipo barras y gasta menos luz que el horno.Besinos
ResponderEliminarBego te ha quedo una lindura de pan.
ResponderEliminarPedazo de corteza :-)))
1 saludito
Hola Bego, que rico con manzana, lo encuentro delicioso y desde luego que me encantaria llevarme un trozo. Espero que estes bien, besos :)
ResponderEliminarQuerida amiga, un pan para mí sorprendente, nunca lo había visto y estoy segura de que será una verdadera delicia. Un beso!!
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