El origen de esta dulcería tan elegante y sutil viene de Francia , aunque son varias regiones las que se disputan la receta.
Unos lo atribuyen a Madeleine Paumier que las elaboró y ofreció al rey Stanislas en 1755 en su castillo de Commercy en una de sus recepciones . A éste le gustaron tanto que decidió renombrarlas con el nombre de la sirvienta.
Otros afirman que se crearon mucho antes , en la época en que comenzaron los peregrinajes hacia Santiago de Compostela . Había una joven llamada Madeleine que ofrecía a los peregrinos estos bizcochitos cocidos en conchas como homenaje hacia ellos.
Sea como sea, lo cierto es que alegran el día a cualquiera , bocados tiernos , esponjosos como una nube y lo mejor de todo, sencillos de preparar, al alcance de cualquiera por poco ducho que sea en temas de cocinado.
Un capricho dulce del que echar mano en cualquier momento, para acompañar el café de la sobremesa o en esos ratitos de lectura que tanto nos agradan.
Me parecen tan bonitas que no me cansaba de sacarles fotografías , siempre sonríen a la cámara con buen talante ja ja.
Las tradicionales llevan miel , pero a mi me gustan menos .
De hecho, pensé que las tenía ya posteadas , no se si lo soñé o que me ha desaparecido la entrada. El caso es que las he buscado para poneros el enlace y no las he encontrado.
Misterios de esta vida internauta o de mi mente despistada, no lo se.
Mis preferidas son estas de limón con diferencia, pero claro es que los sabores cítricos me pierden. Además mi tía me ha regalado un montón de ellos ecológicos , de los que tiene en su finca , con un aroma extraordinario, nada que ver con algunos que se compran en el super , insípidos y sin sabor ninguno.
Hola Bego!! Me encantan, son un bocado breve y delicioso, ideales! Y de limón, que me chifla, como dices, sin preciosas, te quedaron para enmarcar!
ResponderEliminarBesos
¡Madre mía, Bego! Qué fotazas, especialmente la primera, donde se siente la felicidad que te invadía ante estas maravillosas madeleines.
ResponderEliminarYo también perdería la cabeza con la cámara, ya me conoces, jajaja…
Y esos limones, nosotros también tenemos limones ecológicos y la diferencia es un mundo, nada comparable a lo del mercado, que por el tratamiento que les dan de ceras para consérvalos más tiempo, pierden toda su esencia, una lástima al precio que están.
Dile a tu tía que te regale todos los que quiera, que nadie mejor que tú para lucirlos como Dios manda, jajajaja…
Besos achuchaos.
PD: Aún tengo pendiente lo de tu tortilla para El Club, no se me ha olvidado, pero es que no me da la vida para tantas cosas como llevo por delante, espero no demorarlo tanto como Miguel Ángel cuando pintó la Capilla Sixtina, que a la rogativa del Papa preguntando : ¿Cuándo lo acabarás? Respondía: Lo acabaré cuando lo acabe. Jajajajaja…
A mi también me parecen preciosas, de entrada se alegra la vista, y cuando las comes se alegrará todo el cuerpo. No las encuentro dificultosas para hacerlas, ya sabes que la repostería me gusta sencilla, y se ven tan ricas, que seguro que las prepararé en algún momento. Una merienda con ellas es una fiesta.
ResponderEliminarUn beso.
Que belleza y que delicia!...a mi tambien me encantan y sobre todo de limon....es el tamagno perfecto para darse un gusto sublime.....espectaculares!!.......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminar¡Ooooh, qué preciosidad y qué delicia!
ResponderEliminarSe me hace la boca agua, tengo que probarlas.
Buscaré los moldecitos, espero que no sean complicados de conseguir.
Besos.
Se ven perfectas! y se nos hace la boca agua con solo pensar que son de limón!
ResponderEliminarBesos Bego
Querida Bego. No me extraña que no pararas de hacer fotos, te han quedado preciosas. También soy de cítricos y la verdad, no tengo tantas recetas en el blog.
ResponderEliminarMenudo regalazo de tu tía. Aprovecha y repite.
Muchos besos.
Totalmente de acuerdo, te han quedado muy bonitas, no me extraña que sacaras fotos y más fotos.
ResponderEliminarMe encantan los dulces de limón y estas madeleines se ven un bocado delicioso. Tengo que comprarme los moldes, pero todos los que veo son de silicona y los prefiero de metal.
Besos.
Hola Bego a estas alturas ya casi lo menos importante es quien tenga o no la razón sobre la procedencia de esta delicia 🤤con lo que me gusta el limón en los bizcochos....buscaré una alternativa y seguro que caerán 😉besinos wapisima
ResponderEliminarMadre mía, qué pinta mas rica y a la vez, bonita, tienen. Hasta da pena comerlas.
ResponderEliminarBego tienen que estar deliciosos porque la pinta lo dice todo , geniales
ResponderEliminarbesinos
Hola Bego. Sea cual sea su origen lo que nadie pone en tela de juicio es lo deliciosas que están.
ResponderEliminarTienes mano para la repostería y para todo porque haces unas fotos estupendas y ni te cuento el sabor que deben tener estas madeleines, yo, por desgracia, no puedo decirlo, pero tú que las has probado seguro que te han sabido a gloria y es que su aspecto ya lo pregona.
Un abrazo.
Que bonito color tienen, ademas de verse tan esponjosas y ricas, y mira que tengo ganas de hace rato de conseguir un molde para hacer magdalenas, quisiera una para mi cafe.\
ResponderEliminarBesos
Hola Bego, las fotos son increíbles igual que las magdalenas, se ven perfectas y seguro que están deliciosas, además con ese olorcito a limón tan bueno seguro que no puedes comer solo una ¡¡que peligro tienen!!
ResponderEliminarBesos
Ummm menuda pinta deliciosa
ResponderEliminarHola Bego, te han quedado preciosas, siempre sonríen a la cámara, je, je . Y no dudo que estarán deliciosas¡¡¡¡ Besos
ResponderEliminarSe ve muy rico. Saludos
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