Uno de mis entrantes favoritos y aunque no los hago a menudo , sí que cuando los preparo , suelo hacer cantidad para congelar después y tener un rico aperitivo a mano en cualquier momento.
En estas fechas navideñas suelen estar presentes en mi mesa y son una buena propuesta si nos gustan los mejillones, claro está.
Como suele pasar con la mayoría de las recetas, cada maestrillo tiene su librillo y ésta es la forma en la que a mi me gustan y como los suelo preparar.
Ingredientes :
Un kg y medio de mejillones frescos
100 g de gambas peladas(previamente cocidas )
Una cebolla
100 ml de vino blanco
70 ml de aceite de oliva virgen
Sal y pimienta
Unas pizcas de cayena molida al gusto
4 cucharadas colmadas de harina (unos 120g aprox)
100 ml de líquido de cocer los mejillones
250 ml de leche
Para el rebozado : harina, huevo y pan rallado o panko
Elaboración :
Pochamos una cebolla bien picada en una sartén con unas cucharadas de aceite de oliva virgen , hasta que esté bien hecha, casi confitada.
Limpiamos perfectamente los mejillones .
Si hubiera alguno abierto, le daremos un golpecito seco con el mango de un cuchillo, si no se cierra, entonces habrá que tirarlo porque está muerto .
Una vez limpios,los ponemos a cocer en una cazuela amplia con el vino blanco hasta que estén cocidos y se abran.
Colamos el líquido resultante de la cocción a través de un colador con una gasa para que no se filtre ninguna impureza y reservamos. Extraemos la carne del mejillón de las cáscaras que reservaremos para luego rellenarlas.
Con el robot trituramos los mejillones,las gambas y la cebolla,pero que queden trocitos o si lo preferimos los cortamos con un cuchillo.
Por último, procedemos a hacer la bechamel. Ponemos el aceite a calentar en una sartén. Una vez caliente le añadimos la harina y rehogamos unos minutos para que luego no nos sepa la crema a harina cruda.
Vertemos poco a poco los líquidos junto con la carne de los mejillones, gambas y cebolla y vamos removiendo sin parar hasta conseguir la textura perfecta para rellenarlos luego. Salpimentamos pero con cuidado, ya que el líquido de cocer los mejillones es salado de por sí .
Echamos la cayena, si no somos de picante suprimirla.
Una vez lista, cubrimos las conchas con la crema resultante .
Las dejamos enfriar un poco y pasamos por harina, huevo batido y pan rallado o panko para pasar a freírlos en abundante aceite de oliva virgen.
Depositamos en un plato con papel absorbente para que suelten el exceso de grasa.
Después pasamos a otra bandeja y servimos al momento.
Es un entrante muy rico, aunque algo laborioso, pero haciéndolo como tú con antelación y congelándolo, nos alegramos después de tenerlo hecho. Yo prácticamente lo preparo como tú, sin gambas, y por eso conozco su aprecio en la mesa. Menudo aspecto rico tienen.
ResponderEliminarUn beso.
A mi me encantan, pero también los hago poco. Me dan ganas de autoinvitarme a tu casa. Lo mejor es eso, ya que te pones hacerlos en gran cantidad para tener para otras veces.
ResponderEliminarBesos.
Q sencillo y q ricos están eh. Menudo vicio
ResponderEliminarQué rico Bego!!
ResponderEliminarSolo los he comido una vez en un bar de tapas y flipé de lo rico que están.
Te han quedado de 10!!
besos
¡¡Hola Bego!! A mí también me gustan mucho estos mejillones, pero nunca los he hecho en casa. Está bien eso de hacer cantidad, pues ya que te pones a ellos, aprovechas y congelas. Besitos.
ResponderEliminarQue bueno , nunca lo he preparado asi que tomo buena nota besitos
ResponderEliminarHola Bego! Qué ricos lucen estos mejillones, debe ser una delicia total, con sólo ver la última foto el relleno tan cremoso, ya estoy salivando.
ResponderEliminarBesos y feliz semana!
Bego te aseguro que me pones un plato de tus tigres por delante y muero de amor, y es que no como nunca fritos por mi colesterol, pero el día que me doy el gusto, me lo doy, Jajajaja...
ResponderEliminarBesitos
Estos mejillones son una delicia, yo hace mucho tiempo que no los pruebo y me encantan, que buenos que son. Besitos.
ResponderEliminar